La colonoscopia, junto a la gastroscopia, es una de las pruebas que se solicitan con mayor frecuencia en el campo de la medicina. De hecho, es un estudio al que recurrimos habitualmente en nuestras consultas de digestivo y cirugía, aunque también en medicina de familia y otras especialidades. Por lo tanto, es muy importante que los pacientes dispongan de la máxima información posible y que esta sea fácil de comprender.
Sin embargo, la realidad se aleja bastante de estos principios. Esto puede ser por una explicación inadecuada, por una presentación poco atractiva o simplemente porque al paciente no le da la gana de leer. Debido a esto, habitualmente muchas de las personas que acude a realizarse la colonoscopia no saben en qué consiste. Además, tienen un concepto equivocado de la misma basado en lo que han buscado por internet o lo que les han comentado amigos y familiares.
Con el fin de resolver este problema y alejar falsos mitos, vamos a tratar de despejar cualquier duda que pueda estar relacionada con la colonoscopia. Para ello utilizaremos la siguiente receta, compuesta por nuestra experiencia mezclada con información de máxima calidad y aderezada por algo de material gráfico.
Actualizado: 5/2021 —– Publicación original: 3/2020
Índice de secciones
- 1 ¿Qué es una colonoscopia?
- 2 ¿Por qué me han pedido una colonoscopia?
- 3 ¿Existe alguna contraindicación?
- 4 ¿Existe alguna alternativa a la colonoscopia?
- 5 ¿Colonoscopia, con o sin sedación?
- 6 ¿Cómo debo prepararme para una colonoscopia?
- 7 En que consiste y cuánto dura una colonoscopia
- 8 Tipos de terapéutica
- 9 Riesgo de complicaciones de la colonoscopia
- 10 ¿Qué ocurre al terminar la colonoscopia?
- 11 Nuestro consejo
- 12 Fuentes
¿Qué es una colonoscopia?
La Colonoscopia, también conocida como endoscopia digestiva baja, es una prueba que sirve para visualizar la totalidad del colon o intestino grueso. Asimismo, nos permite alcanzar la parte final del intestino delgado, conocida como íleon terminal, al pasar por la válvula que lo une al colon. Además, no solo es útil para establecer diagnósticos, pudiendo también tomar muestras o realizar tratamientos.
Para realizarla se emplea un tubo conocido como colonoscopio, que dispone de una cámara, luces y un canal para aspirar y trabajar. Este dispositivo va conectado a un procesador que emite las imágenes en una pantalla. También cuenta con un sistema que introduce aire para distender las paredes del colon y que se pueda ver bien toda la superficie. Por último, es cada vez más frecuente que incorpore un mecanismo para lavar los restos de suciedad que hayan podido quedar tras la preparación.
Es verdad que antiguamente la colonoscopia era una prueba incómoda y desagradable, por lo que generaba bastante rechazo e incluso miedo. Esto se debía al uso de endoscopios rígidos junto al hecho de que en la mayoría de centros no se empleaba sedación. Por el contrario, en la actualidad el panorama ha cambiado significativamente a su favor. En esta labor han sido fundamentales los avances tecnológicos con el desarrollo de endoscopios flexibles de menor calibre y el uso generalizado de sedación.
¿Por qué me han pedido una colonoscopia?
Las indicaciones de una colonoscopia pueden ser múltiples, siendo el médico el encargado de valorar la indicación y solicitar la prueba. Normalmente se realiza de forma programada, aunque en determinadas situaciones es posible que sea necesario realizarla de urgencia. Por consiguiente, entre los motivos más frecuentes destacarían los siguientes:
- El motivo más habitual suele ser para el cribado de cáncer de colon en la población general. La indicación se puede hacer a través de un programa de prevención o basándonos en los antecedentes familiares.
- También se emplea como seguimiento en pacientes diagnosticados de pólipos o bien como tratamiento de los que no se hayan eliminado aún.
- Para valorar y tratar una hemorragia digestiva baja (ya sea programado o de urgencia). Por ejemplo causada por angiodisplasias, hemorroides, una fisura anal o tras la resección de un pólipo.
- Con el fin de estudiar episodios de diarrea crónica.
- Ante la sospecha de una enfermedad inflamatoria intestinal, ya sea colitis ulcerosa o enfermedad de Crohn.
- En casos de anemia, pérdida de peso inexplicable y significativa, dolor abdominal o cambio del ritmo deposicional, entre otros.
¿Existe alguna contraindicación?
Es raro que exista una contraindicación absoluta que impida realizar una colonoscopia, sin embargo es importante tenerlas presentes. Entre las principales destacan las siguientes.
- Si sospechamos que puede haber una perforación colónica.
- En situaciones de alto riesgo de perforación como un megacolon o una diverticulitis.
- Tener una cirugía abdominal reciente.
- Si la situación clínica del paciente en el momento de la exploración no es la adecuada.
- No haber realizado una preparación correcta para la prueba.
- Si no hemos obtenido el consentimiento informado en un procedimiento que no es urgente.
¿Existe alguna alternativa a la colonoscopia?
La principal alternativa a la colonoscopia son las pruebas de imagen radiológica. Sin embargo, estas tienen una capacidad diagnóstica limitada, además de no poder tomar muestras ni realizar tratamientos.
Antes de la expansión y el desarrollo de la endoscopia la prueba estrella era el enema opaco. Este consiste en introducir un contraste a través del ano que va dibujando las paredes del colon mientras se toman varias radiografías. Con la evolución de los endoscopios modernos y la posibilidad de sedar al paciente esta prueba se utiliza muy poco hoy en día.
Tiene mucho más valor y precisión la llamada colonoscopia virtual o TAC colonoscopia. Estaría indicada en pacientes en los que no se puede realizar una colonoscopia o que presentan alguna contraindicación para la misma. No obstante, tiene el inconveniente de radiar y no poder realizar tratamientos.
Volviendo a la endoscopia, encontramos como alternativa la cápsula endoscópica de colon. En esta modalidad el paciente debe ingerir una cápsula que va grabando imágenes del recorrido por el tubo digestivo en un dispositivo remoto que el paciente lleva conectado al cuerpo. Tiene el inconveniente de que solo proporciona imágenes, sin poder tomar muestras ni realizar tratamientos.
En el caso de que solo sea necesario explorar la parte final del colon es posible realizar procedimientos de menor duración y mayor comodidad. Estos serían la rectosigmoidoscopia, que únicamente valora el recto y el sigma, y la rectoscopia que solo estudia el recto.
¿Colonoscopia, con o sin sedación?
Esta es una de las preguntas más frecuentes en nuestras consultas, de hecho suele ser la primera duda que surge en cuanto nombramos la colonoscopia. Hay que tener en cuenta que se trata de un procedimiento molesto y que puede llegar a ser realmente doloroso. Por lo tanto, nosotros siempre recomendamos que se realice con sedación salvo que exista alguna contraindicación o petición expresa del paciente de no dormirse.
En primer lugar, siempre que se realice la prueba con sedación, se debe valorar la necesidad de acudir a una consulta de pre-anestesia. Para ello nos basamos en las enfermedades que padece el paciente o la medicación que toma. Si consideramos que efectivamente debe valorarle un anestesista, será necesario aportar pruebas adicionales como una analítica, un electrocardiograma o una radiografía de tórax.
Durante el procedimiento se emplea una sedación superficial en la que el paciente respira por sí mismo en todo momento. Es muy segura y evita las molestias ocasionadas por la colonoscopia como el dolor o la distensión abdominal. Además, es frecuente que nos comenten que han tenido un sueño muy agradable.
Por último, en caso de no poder o no querer usar sedación, la colonoscopia también se puede realizar. Sin embargo, es posible que aparezcan molestias, cuya intensidad dependerá de las características y la percepción del dolor de cada individuo.
¿Cómo debo prepararme para una colonoscopia?
La preparación para una colonoscopia comienza en el mismo momento en que el médico nos solicita la prueba. Para ello nos deben entregar varios documentos, incluyendo tanto consentimientos como indicaciones, con el fin de despejar dudas y facilitar la exploración. En nuestro caso, hemos hecho un resumen por secciones con los elementos que consideramos más importantes.
Seguir todas las instrucciones que nos den será fundamental para que la colonoscopia pueda realizarse de forma completa, pudiendo visualizar adecuadamente la mucosa del colon. De hecho, uno de los puntos que suelen generar más confusión está relacionado con la dieta y la preparación de limpieza colónica. Si quieres profundizar más en estos aspectos y saber cómo hay que tomar los sobres te recomendamos leer esta entrada para conseguir una limpieza óptima.
Dieta previa a una colonoscopia
Con el fin de lograr una limpieza adecuada del colon se recomienda realizar los días previos a la prueba una dieta pobre en residuos. Esto significa que debemos evitar los alimentos con fibra durante al menos 3 días, que se pueden ampliar en pacientes estreñidos. Por ejemplo, aconsejando entre 5 – 7 días de dieta previa.
El día de la prueba habrá que realizar ayunas de sólidos desde 8 horas antes y de líquidos (agua incluida) al menos 2 horas antes. Esto es fundamental, pues de lo contrario es posible que no se pueda emplear sedación o incluso que se tenga que suspender la prueba. De hecho, puede haber riesgo de que el contenido gástrico pase a los pulmones (aspiración), lo que se considera una situación muy grave.
Cómo debo tomar mi medicación antes de la colonoscopia
Debemos seguir tomando nuestra medicación habitual incluso el mismo día de la prueba, salvo los fármacos que nos hayan recomendado retirar. Además, ante cualquier duda deberemos consultar con un médico, puesto que nunca debemos quitarlos por nuestra cuenta.
Si tenemos alguna medicación para la sangre como antiagregantes (Plavix, otros) o anticoagulantes (Sintrom, otros), será imprescindible que nos indiquen lo que debemos hacer. Sin embargo, el ácido acetil salicílico o aspirina (adiro) de 100mg siempre se puede mantener.
Por otra parte, si tomamos hierro deberemos suspenderlo 7 días antes de la colonoscopia por el riesgo de que altere la correcta limpieza del colon.
Preparación de limpieza colónica
Como decíamos, esta es la parte más importante antes de la prueba y por ello es fundamental seguir las instrucciones que nos faciliten. Estas variaran dependiendo del tipo de preparación y de la hora de citación (turno de mañana o de tarde). Además, en caso de padecer estreñimiento es recomendable tomar laxantes como movicol, duphalac o bisacodilo desde al menos 3 días antes de la colonoscopia.
Ropa y accesorios
El día que nos hagan la prueba es recomendable acudir con ropa cómoda y que se quite fácilmente. Antes de entrar a la sala de exploración tendremos que retirar todos los objetos metálicos (reloj, anillos, pulseras, piercings…) que llevemos. También recomendamos avisar si tenemos prótesis dentales o en su defecto haberlas extraído previamente. Dependiendo del centro, en algunos sitios nos tendremos que quitar toda la vestimenta y ponernos un pijama, mientras que en otros no será necesario.
Consentimiento informado
En el consentimiento informado se recoge información variada, incluyendo una explicación breve del procedimiento así como los posibles inconvenientes que pueden producirse. Es fundamental que el día de la prueba lo hayamos leído y firmado, pues de lo contrario la exploración no se realizará.
Este se suele entregar al solicitar la exploración, aunque en ocasiones puede perderse o incluso olvidarse en casa. En ese caso, antes de comenzar la colonoscopia, se nos debería entregar uno nuevo, que deberemos leer y firmar. Por otra parte, si queremos que nos seden también deberemos leer y firmar un consentimiento adicional de anestesia. Además, en la situación actual de pandemia por el coronavirus se está facilitando otro documento adicional avisando de los posibles riesgos.
Por último, aunque no es imprescindible, es muy recomendable llevar el volante en el que se indica el motivo de petición.
¿Debo ir acompañado a una colonoscopia?
En el caso de que la prueba se vaya a realizar con sedación debemos ir acompañados por un adulto. De lo contrario es posible que no nos duerman o que nos obliguen a quedarnos en observación un tiempo más prolongado del habitual. Esto se debe a la necesidad de estar vigilados por si aparece algún efecto adverso de la sedación. De hecho, ese día no podremos conducir. Tampoco se recomienda realizar actividades que requieran estar alerta, utilizar maquinaria pesada ni tomar decisiones con vinculación legal.
Por otro lado, si no disponemos de acompañantes y queremos que nos duerman, es recomendable advertirlo antes de la prueba. Por último, si no queremos que nos seden no es necesario ir acompañados.
Consideraciones especiales para la colonoscopia
- Embarazo: parece recomendable evitar la colonoscopia durante el embarazo para proteger al feto de posibles daños, reservando la exploración para situaciones en las que sea imprescindible y los beneficios superen a los riesgos. No obstante, en caso de necesitarla se podría emplear sedación con propofol a partir del segundo trimestre de embarazo de forma relativamente segura, o por el contrario realizarse sin sedación.
- Lactancia: en este periodo resulta seguro realizar la colonoscopia. Por otra parte, es muy improbable que la preparación pase a través de la leche materna al bebé y en caso de que esto ocurriese únicamente le causaría una diarrea leve. Respecto a la sedación, que se excreta en pequeñas cantidades en la leche materna, sí que se deben tener algunas precauciones adicionales. Por ejemplo desechar la primera toma y esperar al menos entre 4 y hasta 24 horas tras la prueba para volver a dar el pecho al bebé.
En que consiste y cuánto dura una colonoscopia
En este apartado vamos a conocer en profundidad como se trabaja en una unidad de endoscopias desde que el paciente llega hasta que se completa la colonoscopia.
Preparativos dentro de la unidad de endoscopias
En primer lugar, antes de acceder a la unidad, deben confirmar nuestra identidad. A continuación, en la sala de exploración nos harán preguntas relacionadas con alergias y otras cuestiones médicas. De hecho, por seguridad es probable que estas preguntas se repitan varias veces, ya sea por parte de enfermería o del médico. Seguidamente, antes de pasar a la camilla, se comprueba que toda la documentación es correcta y está firmada.
Una vez este todo listo nos pedirán tumbarnos en la camilla en decúbito lateral izquierdo, es decir, de lado mirando hacia la pantalla del endoscopio. Además, debemos colocar las piernas ligeramente flexionadas en posición fetal. Antes de empezar la colonoscopia la enfermera nos colocará en el dedo una pequeña pinza o pegatina conectada a un monitor. Esto sirve para registrar nuestras constantes vitales (saturación de oxígeno y ritmo cardiaco) durante el procedimiento.
Por último, si la prueba se va a realizar con sedación nos canalizarán una vía intravenosa para administrar la medicación y nos colocaran unas gafas nasales para suministrarnos oxígeno adicional. Por el contrario, si la colonoscopia es sin sedación todo esto no será necesario.
Inicio de la colonoscopia
Independientemente de la sedación, el primer paso será realizar un tacto rectal. A continuación, se introduce el colonoscopio bien lubricado a través del el ano, teniendo como objetivo alcanzar la parte final del colon conocida como ciego. Una vez allí se valoran tanto el orificio apendicular como la válvula ileocecal (es la unión entre el intestino delgado y el grueso). Si se considera necesario se puede pasar al intestino delgado a través de esta para observar la mucosa.
Posteriormente se comienza a retirar el tubo pasando por los diferentes tramos del colon (ascendente, transverso, descendente y sigma) hasta llegar al recto. Durante este proceso se valora cuidadosamente la mucosa y en función de los hallazgos se procedería a tomar muestras o realizar tratamientos si son oportunos.
Duración de la colonoscopia
La duración de la colonoscopia a partir de este momento dependerá del tiempo que se tarde en alcanzar el ciego, junto con el tiempo empleado en revisar toda la mucosa o tiempo de retirada (debe ser un mínimo de 6 minutos), que puede ser mayor dependiendo del grado de limpieza del colon o de los tratamientos que se realicen. De media, en caso de que todo sea normal, el tiempo mínimo global suele rondar los 10-15 minutos.
Tipos de terapéutica
En una colonoscopia diagnóstica, el procedimiento que se realiza con mayor frecuencia (sólo si se considera necesario) es la toma de muestras o biopsias. Esto se realiza mediante una pequeña pinza que se introduce a través del canal de trabajo del endoscopio. Es por ello que las muestras tienen un tamaño de entre 1-2 mm y no sentimos dolor cuando se recogen.
Si se trata de una colonoscopia terapéutica, el tratamiento más frecuente suele ser el uso de asas metálicas para cortar pequeñas lesiones conocidas como pólipos, para lo que se emplean diferentes técnicas y materiales según su tamaño y morfología, como por ejemplo pinzas de biopsias o asas metálicas. Por otro lado, se pueden emplear tratamientos para controlar hemorragias, como clips metálicos o la inyección de sustancias vasoconstrictoras, especialmente útiles en situaciones urgentes.
Riesgo de complicaciones de la colonoscopia
La colonoscopia es un procedimiento generalmente seguro, cuyo riesgo depende principalmente de la complejidad de la prueba (diagnóstica o terapéutica) y de la situación clínica de base del paciente.
Relacionadas con la preparación
Habitualmente son debidas a la alteración de los electrolitos (principalmente sodio y potasio) por las pérdidas intestinales junto al aumento de ingesta de líquidos. También pueden aparecer náuseas y vómitos producidos por la ingesta de estos laxantes y que en ocasiones impiden completar adecuadamente la preparación.
Por otro lado, secundario a la ingesta insuficiente de líquidos y al ayuno, algunos pacientes refieren mareos y malestar general. Para prevenirlo recomendamos mantener una hidratación abundante durante la preparación y respetar las normas sobre la dieta. En cualquier caso, en el propio servicio de endoscopias administran sueros intravenosos con la sedación, lo que ayuda a resolver estos problemas.
Relacionadas con la anestesia
La complicación más frecuente suele ser la desaturación de oxígeno. Esto ocurre cuando los fármacos sedantes hacen que se reduzca demasiado la capacidad para respirar por uno mismo, disminuyendo la concentración de oxígeno en sangre. En general estos episodios suelen durar pocos segundos, recuperándose rápidamente sin ningún tipo de secuela y permitiendo completar la colonoscopia con normalidad.
Relacionadas con la prueba
En la colonoscopia diagnóstica los riesgos son bajos, siendo mayores en los procedimientos terapéuticos y aumentando exponencialmente en función de la complejidad de los mismos.
Entre las posibles complicaciones descritas pueden aparecer sangrados, laceraciones mucosas, distensión o dolor abdominal, siendo mucho más infrecuente por ejemplo el riesgo de perforación, que sería una complicación severa.
¿Qué ocurre al terminar la colonoscopia?
Una vez finalizada la colonoscopia pasaremos a la sala de recuperación, donde estaremos monitorizados hasta que se compruebe que nos encontramos bien y estamos despiertos. El tiempo que se suele pasar aquí varía dependiendo de cómo nos encontremos, pero suele situarse entre los 30 – 60 minutos de media. Por el contrario, si no se ha utilizado sedación, una vez finalizada la colonoscopia podremos irnos de alta sin pasar por aquí. Antes de abandonar el centro es probable que nos entreguen una copia del informe de la prueba, expliquen brevemente los hallazgos de la misma.
Una vez en casa podremos seguir una dieta normal salvo que nos indiquen lo contrario. También es importante beber al menos 1 litro de agua desde que salgamos de la unidad de endoscopias. Por otra parte, es posible que durante las horas posteriores a la prueba notemos algo de hinchazón o molestias abdominales. Si en días sucesivos notáramos dolor abdominal, sangre en las heces o fiebre, deberemos acudir a urgencias para valorar posibles complicaciones.
Nuestro consejo
La colonoscopia es una de las pruebas que realizamos con mayor frecuencia en aparato digestivo. De hecho, es probable que la mayoría tengamos que pasar por ella, aunque sea de forma preventiva. Por lo tanto, es fundamental saber en qué consiste, como prepararnos y que riesgos y beneficios tiene. Además, cada día la tecnología avanza más rápido, mejorando los procedimientos, las técnicas y el confort del paciente. Por último, no podemos olvidar que la colonoscopia es útil, no es dolorosa siempre que se haga con sedación y es, sobre todo, segura.
Fuentes
The use of carbon dioxide in gastrointestinal endoscopy. Gastrointestinal endoscopy. Marzo 2016
Risks Associated With Anesthesia Services During Colonoscopy. Gastroenterology. Diciembre 2015.
Post-Colonoscopy Complications: A Systematic Review, Time Trends, and Meta-Analysis of Population-Based Studies. The American journal of gastroenterology. Agosto 2016.